En conmemoración al Día de la Tierra, el lunes 22 de abril, nuestra comunidad se unió en una emocionante jornada de acción ambiental. Desde tempranas horas de la mañana, estudiantes se reunieron para contribuir al cuidado de nuestro entorno.

La primera actividad fue la plantación de árboles. Con palas en mano y sonrisas en el rostro, nos adentramos en el terreno designado para plantar liquidámbar y quillay. Cada árbol plantado representaba un compromiso con la naturaleza, una promesa de cuidar y proteger nuestro hogar común. Con cada hoyo cavado, sentimos que estábamos sembrando esperanza y renovación para las generaciones futuras.

Posteriormente, nos sumergimos en la limpieza del entorno. Armados con guantes y bolsas de basura, nos dispersamos por el colegio y sus alrededores para recolectar residuos y desechos. Fue impactante descubrir la cantidad de basura que había sido descuidada, pero cada bolsa llena era un paso más hacia la restauración de la belleza natural de nuestro entorno.

A lo largo de la jornada, no solo trabajamos en equipo, sino que también aprendimos sobre la importancia de cuidar nuestro planeta. Reflexionamos sobre cómo nuestras acciones diarias pueden impactar el medio ambiente y cómo podemos ser agentes de cambio positivo en nuestra comunidad.

En este Día de la Tierra, plantamos semillas de esperanza y acción. Recordamos que cada pequeño gesto cuenta y que juntos podemos hacer una diferencia significativa en el mundo que compartimos. Sigamos adelante con determinación y amor por nuestro planeta.

¡Porque cada día es el Día de la Tierra!