¿Cómo logro compromiso en mis alumnos?

Esta pregunta es muy recurrente entre los profesores, los que normalmente se quejan de la falta de compromiso que tienen los alumnos de hoy en día. Los alumnos, en general, han ido perdiendo su identidad con su entidad educacional y no logran ver como suyos los logros de ésta, porque no les compete.

Pero eso, en gran parte, no es culpa de ellos. Los alumnos necesitan identificarse y comprometerse con algo, pero ese algo debe ser significativo y debe dejarle una sensación positiva.

Los profesores, preocupados siempre de hacer lo correcto, preocupados de lo académico por sobre todo, ven como la participación de los alumnos es cada vez menor y debe ser inducida o canjeada por algo más. Pero esta conducta también es observable a nivel docente… cada vez cuesta más que los profesores participen y se comprometan a hacer algo fuera de su quehacer normal. Me pregunto ¿será por el estrés y sobrecarga de trabajo? ¿Será que están desmotivados?¿Será que los que organizan las actividades no son precisamente los más populares? Bueno, independiente de la respuesta creo que debemos hacernos esas mismas preguntas al momento de juzgar o criticar esa falta de compromiso de los alumnos, puesto que estamos actuando como modelos y no estamos dando el mejor ejemplo.

Hacer algo extra implica siempre un mayor esfuerzo y requiere siempre de superar la resistencia inicial. Pero cuando se logra pasar ese obstáculo, los resultados hacen que todo esfuerzo haya valido la pena.

Lo bueno de todo esto, es que no son todos los profesores ni todos los alumnos los que han perdido las ganas de hacer algo más. Siempre hay personas que pese al estrés, a la sobrecarga de trabajo y al desgano normal producto del cansancio, van a dar algo más de sí para hacer de esta vida algo menos rutinario. Siempre habrá personas dispuestas a quedarse un poquito más, a juntarse a ensayar, a ocupar su tiempo libre (que es escaso) en realizar una tarea extra en pro de la comunidad. De lo contrario, no existirían extraescolares, no habría números artísticos en los actos, intervenciones teatrales, etc.

¿Qué debemos hacer entonces para hacer que esta minoría deje de serlo? Primero que nada, partir por casa: 1) Siendo un ejemplo de compromiso y participación genuina (no obligada ni de malas ganas). 2) Apoyando a esta minoría motivada y no poniéndoles obstáculos adicionales. 3) Valorando estos esfuerzos, porque sabemos que detrás han dejado horas de sueño o descanso. 4) Mostrando un buen producto, preparado, organizado, coordinado, para que nuestros alumnos sientan que esa es la vara con que se miden las cosas. 5) Dejando de lado las individualidades y diferencias personales para trabajar en equipo y así evitar que solo unos pocos se lleven el trabajo pesado.

En conclusión, creo que cuando los alumnos ven compromiso real de toda la comunidad, no les queda otro remedio que actuar de manera más comprometida. El compromiso se logrará en la medida que exista un clima positivo y una actitud colaborativa. La vocación y el amor por este colegio son claves en el logro del compromiso real.