Pero lo anterior no es fruto del azar, sino muy por el contrario, es el resultado de un trabajo continuo y disciplinado que ya lleva varios años. De hecho, su amor por el deporte se inició cuando era muy pequeña integrando los talleres deportivos del colegio. De esta manera experimentó en el patinaje, fútbol y finalmente voleibol, donde según ella canalizó sus energías e hiperactividad. Hoy en día su rutina deportiva son 2 horas de entrenamiento y preparación física, 4 veces a la semana y forma parte del club deportivo “Trekán”, donde ha forjado gran parte de sus logros personales y deportivos.
La conversación culminó con un mensaje personal: “A todos los que quieren lograr algo, les digo que con esfuerzo y disciplina lo conseguirán. Partan no compitiendo con otros, sino más bien consigo mismos. Es sano y alentador. Den siempre lo mejor de sí mismos y verán como los buenos resultados llegarán por sí solos”.

